Autorizan ensayos clínicos con suero de caballo neutralizante del coronavirus
La Administración Nacional de Medicamentos ANMAT autorizó la realización de ensayos clínicos con suero de caballo neutralizante del coronavirus, que desarrolló Inmunova junto a la Universidad Nacional de San Martín y otras 6 instituciones.
Participaron del proyecto 70 investigadores y promete una efectividad mayor que la del plasma de pacientes recuperados. El Sanatorio Güemes de CABA fue elegido para los primeros estudios clínicos.
En ensayos previos, este medicamento “hiperinmune” tuvo la capacidad de frenar in vitro el crecimiento del virus, por lo que ahora se les suministrará a pacientes con COVID-19 inmediatamente después que el resultado de su test dé positivo.
Para lograr este suero, inyectaron en caballos una proteína del virus SARS-CoV-2 que sirvió como antígeno, es decir, que al introducirse en el organismo de estos animales indujo una respuesta inmunitaria provocando la formación de dichos anticuerpos.
Este desarrollo es considerado de innovación abierta, ya que es el resultado de una articulación entre instituciones públicas y privadas que al compartir sus conocimientos y recursos, lograron que en tan solo 70 días este medicamento pueda ser aplicado en pacientes.
Pero… ¿Cómo se obtiene este suero? ¿Por qué se utilizan caballos? ¿Por qué es más efectivo que el plasma de humanos?
Fernando Goldbaum, director del Centro de Rediseño e Ingeniería de Proteínas de la Universidad Nacional de San Martín (CRIP-UNSAM) y socio fundador de la empresa biotecnológica INMUNOVA, dos de las instituciones desarrolladoras del proyecto, lo explica en esta nota.
Suero “hiperinmune”
“El coronavirus entra a la célula a través de una ‘proteína que actúa como llave’. Esta proteína hace que su membrana se una con la membrana del virus, introduciendo el material genético dentro de la célula y permitiendo así su propagación. Nosotros tomamos el pedacito de esta proteína que actúa como ‘llave’ y con ella inmunizamos a los caballos. De esta manera, los animales produjeron una cantidad muy grande de anticuerpos que, al unirse a la proteína, neutralizaron la capacidad del virus de entrar a las células. En definitiva, evitaron que el virus utilice esa ‘proteína llave’”, explica Goldbaum.
¿Por qué en caballos? ¿Por qué es más potente que el plasma de pacientes?
“Tanto el suero como el plasma son dos formas diferentes de ‘inmunización pasiva’, es decir, que los anticuerpos se producen en otro organismo y después son transfundidos (a diferencia de la vacuna que en la que la persona vacunada genera sus propios anticuerpos)”.
“La diferencia es que el suero hiperinmune de caballo es mucho más potente y se puede producir en gran escala. Por un lado, porque los caballos tienen un volumen de sangre de seis a siete veces mayor que el de los humanos (un adulto posee entre 5 y 6 litros en cambio un equino entre 35 y 40) y por otro lado, porque a los caballos se los hiperinmuniza, o sea que se les da una cantidad muy grande de antígeno que les permite producir una importante cantidad de anticuerpos, con una potencia entre 20 y 100 veces mayor a los que producen los pacientes durante una infección natural”, asegura el especialista.
Del Síndrome Urémico Hemolítico al coronavirus
La tecnología que aplicó este grupo de investigación no es nueva. Algo muy similar se utiliza desde hace 30 años en otros tratamientos por envenenamientos, intoxicaciones y exposición a diversos virus. “Al inicio de la pandemia estábamos realizando las primeras fases clínicas de un suero hiperinmune contra la toxina que produce el síndrome urémico hemolítico, y un medicamento similar contra el hantavirus. Cuando vimos que podría ser una potencial solución contra el Covid, adaptamos muy rápidamente nuestro proceso productivo cambiando solamente el antígeno para inmunizar a los caballos”, relata sobre la experiencia.
¿Cubriría una demanda a nivel nacional?
Previendo una demanda masiva, el equipo de investigadores está trabajando para cubrir las necesidades de todo el país. “Si al inmunizar pocos caballos pudimos producir cientos de tratamientos, al multiplicar por 10 o por 100 la cantidad de animales inmunizados podríamos pasar a producir decenas de miles de tratamientos. Ya estamos trabajando entre la universidad y la empresa privada mAbxience para producir de forma masiva esta proteína recombinante. Además, productores de caballos nos están permitiendo inmunizar gran cantidad de animales, y la empresa BIOL se encargará de producir estos sueros a gran escala”.
La importancia de la articulación y el rol de la universidad
Por último, Goldbaum ponderó la importancia de la convergencia de este proyecto: “Nadie en una situación de pandemia puede ponerse a aprender algo que no sabía bien de antemano. Por eso estamos convencidos que haber podido desarrollar un medicamento en tan pocos días se debió, justamente, a una correcta vinculación público-privada, en la que instituciones que ya venían realizando trabajos de este tipo se pusieron a disposición para complementarse y dar así una respuesta rápida a la sociedad. A futuro, creemos que este tipo de procesos podría aplicarse también a otros virus, ya que permite el desarrollo rápido de un medicamento seguro y eficaz”.
Fuente: Ministerio de Educación de la Nación